miércoles, septiembre 19, 2007

16 de septiembre


El 16 comenzó con una pequeña revolución en casa, muchas llamadas telefónicas y la salida temprana de mi Amor rumbo a Limache, yo me quede en casa con las princesas y el bebe, ordenando, limpiando y lavando, lo típico de lo que hago cuando estoy en casa, cerca de las 11:00 una llamada telefónica me indico que el auto había sido cerrado y las llaves se habían quedado adentro, debía buscar el otro juego de llaves, así que comenze a buscarlas por todas partes, porque siempre pasa la mismo, cuando buscas algo por lo general nunca se encuentra, bueno en eso andaba cuando otro llamado telefónico me indico el lugar donde estaba así que me dispuse a esperar a que la vinieran a buscar, mientras seguía con los quehaceres domésticos, de pronto el ruido ensordecedor de la moto, me indicó que Roy llegaba, así que a pasarle la llave del auto no sin antes molestarlo un ratito por eso, me pidió que hiciera almuerzo porque me pasaría a buscar para irnos a la parcela, no me gusto mucho esa idea, pero en fin, tenía que hacerlo él estaría allá con mis hermanos y tenían que comer algo, así que para allá nos fuimos cerca de las 3 de la tarde.

Del verano que no estaba en la parcela, nada ha cambiado allá, solo que esta vez estaban dos de mis hermanos, mi suegro, mi esposo, un tío, el seba, mi sobrino y yo, los niños jugando vueltos locos corriendo y saltando por todas partes y los adultos cuchillos en manos con el animal, estuve mirando un buen rato hasta que dije: ya pasenme un cuchillo que voy a ayudar a descuerar el animal, así pasamos cerca de tres horas hasta que con el animal descuerado, desgrasado y trozado, volví sola a casa mientras los demás se quedaban arreglando todo allá.

Cerca de las 8 de la noche, llego Roy a buscarme para ir a casa de mi cuñada, todos estaba allá, así que nos tomamos una bebida, charlamos un rato y a casa, estábamos todos cansados y el 17 era un día largo así que a dormir nos fuimos, las niñas habían volado, así que el seba, roy y yo, nos dormimos cerca de las 10, porque al otro día sería un día de compartir con la familia de mi esposo y eso era algo que no me emocionaba mucho que digamos, pero el 18 sería con mi familia así que tenia que superar el 17.

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